Trastornos de Ansiedad
La ansiedad ocasional es parte normal de la vida de un niño. Sentirse ansioso cuando se enfrenta a un problema en la escuela, o antes de contestar un examen, o cuando va a tomar una decisión importante, le pasa a todos los niños (y adultos) en algún punto de sus vidas.
Los trastornos de ansiedad son más que preocupación o miedos temporales. Para un niño que sufre de ansiedad esto es algo constante, la ansiedad no se va y puede empeorar con el tiempo. Los síntomas pueden interferir con sus actividades diarias, las tareas escolares, sus intereses y sus relaciones.
Austin Child Guidance Center trabaja y atiende con cualquier parte de la familia que haya experimentado trastornos de ansiedad incluidos:
Ansiedad social: Afección mental crónica en la que las interacciones sociales provocan ansiedad irracional. Para los niños y adultos con ansiedad social, las interacciones sociales cotidianas causan ansiedad, miedo, timidez y vergüenza.
Los síntomas pueden incluir miedo excesivo a situaciones en las que la persona pueda ser juzgada, preocupación por la vergüenza o la humillación, o preocupación por ofender a alguien.
La terapia y, en algunos casos, los medicamentos pueden ayudar a aumentar la confianza y mejorar la capacidad de interactuar con los demás.
Trastorno obsesivo-compulsivo (TOC): Es una condición mental crónica que se caracteriza por pensamientos y miedos irracionales (obsesiones) que llevan a conductas repetitivas (compulsiones).
El TOC a menudo se centra en temas como el miedo a los gérmenes o la necesidad de organizar los objetos de una manera específica. Los síntomas suelen comenzar gradualmente y varían a través de los años.
El tratamiento incluye terapia, medicamentos o ambos.
Trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH): Una condición crónica que incluye dificultad para mantener la atención, hiperactividad e impulsividad.
Este trastorno comienza con frecuencia en la infancia y puede continuar hasta la edad adulta. Puede contribuir a una baja autoestima, relaciones problemáticas y dificultades en la escuela o el trabajo. Los síntomas incluyen atención limitada e hiperactividad.
Los tratamientos incluyen medicamentos y terapia.